Resumen
Miércoles, 27 de abril
Hoy me llama la atención un hecho curioso. Después del desayuno avisan para recoger la medicación. Una retahíla de compis, en pésimo estado unos, en mejor condición los otros, se acercan a que les suministren los supuestos medicamentos. Una enfermera va dándoles unos vasitos plásticos con las pastis, y obliga a que cada cual se las engulla delante de sus ojos. Pero algunos espabilaos, alguno de los de la Metadona, hacen que tragan y, en un escorzo rápido, vuelven a escupir el líquido en el vasillo sin que la de blanco se pispe.
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Uno de esos se acerca al comedor, donde aún nos encontramos mojando el pan con margarina en ese aguachirle llamado café. Desde hace dos días comparto mesa con el kurdo. Uno que se sentaba junto a él se fue de conducción a tomar por culo, a la prisión de Teixeiro, y el turco, kurdo-turco, me hizo un hueco. La verdad, me siento cómodo con él. Además, todos lo respetan, no se mete con nadie, y tiene siempre peculio.
A lo que iba. El de la Metadona se acerca a la mesa de al lado y le pasa de estrangis el vasito de Metadona babeada a un menda. Éste se lo guarda de velocidad y le paga al medicamentado con un paquete de Fortuna; trato realizado. Algunos gustan de esa bazofia llamada Metadona, opioide sintético descubierto en Alemania en la década de los cuarenta, producido actualmente por algunos laboratorios farmacéuticos y que tantos hígados y otras entrañas daña en aras de la desintoxicación del caballo. Los mendas la mezclan con otras sustancias y, de esta manera, viajan a los confines del planeta sin necesidad de avión ni de billete, y lo hacen en primera clase.
Sin embargo, las pastis de laboratorio más temibles en estas casas, por lo que me cuentan los compis, son las famosas Tranquimazine, ya que ingeridas con algunas otras porquerías ponen en estado de alerta a todo el personal.
Bibliografía
Nacido en Madrid, cursa estudios en el Colegió Alemán. Viaja a Sudamérica donde, durante once años, crea varias empresas.
Regresa en 1987 de nuevo a Madrid y funda una serie de empresas relacionadas con el comercio internacional.
En 1998 quiebran sus negocios por verse involucrado en unos negocios turbios y entra en prisión.
En la cárcel estudia la carrera de Historia y escribe varios libros.
A su salida de prisión comienza a trabajar en la Fundación Bip Bip, se vincula a proyectos sociales y culturales, además de continuar sus estudios de doctorado.
En 2008 crea la página Web www.infoprision.com, una página enfocada a la ayuda de los presos y sus familias a la cual anexa el Blog www.elcielodesdeuncubo.com, en donde cuelga historias penitenciarias reales y manuales de supervivencia en prisión.
En 2010 constituye la Fundación Maná, entidad dedicada a cubrir la brecha social con los colectivos desfavorecidos, especialmente el penitenciario, a través de la cultura y la obra social.
En este mismo año publica su primera novela Vis a Vis, finalista en un par de premios literarios.
Actualmente imparte conferencias de Literatura, Reinserción Social y Derecho Penitenciario aplicado en diversas Universidades y Ayuntamientos.