Resumen
“Con la plaza de Colón llena de gente con banderas de España y con pancartas en las que se leía:no estáis solos, y con ETA rendición, con victimas traición, los concentrados han pedido la paralización del plan integral de reinserción de terroristas anunciado por el Gobierno porque piensan que tratan de favorecer a los asesinos que ahora se disfrazan con piel de cordero por su conveniencia”
“La presidenta de la fundación de victimas de terrorismo, ha advertido que lasociedad vasca no está aún preparada para la Justicia Restaurativa”
Estas noticias no hacen sino corroborar una triste realidad y es queno se sabe qué es la Justicia Restaurativa y por lo tanto no se ha sabido trasladar de forma clara, el concepto y valores de esta justicia a los ciudadanos y en especial a las victimas.
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La Justicia Restaurativa está por y para las víctimas, y por eso ésta, se debe contemplar desde la óptica de los servicios de atención a las víctimas, (como así lo hace la directiva europea de 18 de mayo de 2011, que pronto entrará en vigor), por tanto es difícil entender que las victimas se opongan a algo que las beneficia y que está para ayudarlas. Esta oposición no puede venir de otra cosa que del desconocimiento, acerca de qué es realmente esta justicia, tanto de las víctimas como de los que se erigen en conocedores de estos procesos restaurativos.
La Justicia Restaurativa, es por tanto, un nuevo paradigma de justicia para responder al delito que se centra en el daño causado y las acciones requeridas para reparar este daño. El delito no solo vulnera una norma sino que causa un daño a una persona y los delincuentes lo que deben hacer es tomar responsabilidad por este daño. Los encuentros restaurativos van a ayudar a la victima a obtener respuestas, a desahogarse, van a tener el protagonismo que las corresponde y sobre todo tendrán voz siendo personas dignas de respeto y consideración.
Como se puede desprender de todo lo dicho, la Justicia Restaurativa se nutre de una serie de valores y principios que hace que la justicia sea más humana, tenga en cuenta de forma prioritaria las necesidades de las victimas y facilite la asunción de responsabilidad por el infractor. La victima se siente escuchada, respeta y si lo desea puede confrontar al infractor (no todas las victimas querrán, pero para muchas esto puede ser muy importante en su camino hacia la recuperación del delito). Una parte de esta justicia son los encuentros, (bien en forma de mediación penal, conferencias o círculos).
El principal error para mi, es que las palabras Justicia Restaurativa parece que producen miedo por eso, en el plan de reinserción, se contempla esta justicia pero se llama de otras maneras como encuentros de reparación del daño, lo lógico es darlo el nombre que le corresponde, porque si ya se tienen reticencias en esto, difícilmente el ciudadano va a obviar estas cosas.
Otro problema que puedo apreciar, viene muy relacionado con la frase que he extraído de un periódico y que decía la presidenta de la fundación de victimas del terrorismo: “la sociedad vasca aún no está preparada para la justicia restaurativa”. ¿Acaso solo la sociedad vasca ha sufrido el terrorismo? Por supuesto que no, las víctimas están repartidas por todo el territorio nacional e incluso más allá de nuestras fronteras por eso, es la sociedad española en general, la que debe estar preparada para esta justicia. Y ¿cómo no va a estarlo para algo que es beneficioso para las propias victimas y para la sociedad en general? Las victimas son seres humanos que han sufrido un delito con independencia de su origen o lugar de residencia, de ahí que estos encuentros restaurativos no son algo que incumbe exclusivamente a esta comunidad autónoma sino que nos atañe a todos, victimas directas de estos delitos, y también a las victimas indirectas. (Otra cosa es que se preste especial atención a las personas que viven en el País Vasco, para facilitar la convivencia y prevenir conflictos sociales).
Si nos centramos en estos encuentros de reparación del daño, llamados así por el Gobierno y que son los que generan la oposición de las victimas y de la sociedad española, habría que tener en cuenta una serie de cosas para evitar este rechazo frontal de muchas de ellas:
Primero, se debe tener claro qué es la Justicia Restaurativa, y su misión de ayuda y revalorización de las victimas. Sin esto, chocaremos una y otra vez con el rechazo de estas. Un problema es que estos encuentros restaurativos están incluidos dentro del plan de reinserción de presos, con lo que automáticamente parece que el centro de atención son estos delincuentes y se relaciona con la obtención de beneficios penitenciarios. Lo lógico y deseable sería incluir esta posibilidad de encuentros dentro del futuro estatuto de victimas o en alguna otra norma de ayuda a las personas que sufren delitos. (Así se podrá apreciar de una manera más visible que el centro de atención son las victimas)
Segundo, debería propiciarse estos encuentros en toda clase de delitos serios y no solo en terrorismo, siempre que las victimas así lo deseen, de esta forma no haríamos distinciones entre victimas, y no haríamos diferencias entre delincuentes puesto que la reinserción debe propiciarse en todos. Así la sociedad no pensaría que se está dando un tratamiento especial y diferente a estos presos por cuestiones políticas.
Tercero, si verdaderamente se han hecho ya, encuentros restaurativos con éxito, se necesitan no tantos "teóricos", sino victimas que cuenten su historia. Es esencial que las victimas hablen y ofrezcan su visión de en qué les ha ayudado la justicia restaurativa. Hay que dar voz a las personas que sufren un delito, esto es importantísimo en la Justicia restaurativa ya sea dentro de estos encuentros o de una forma global.
Cuarto, se debería evitar el secretismo e informar a los ciudadanos de forma clara qué se va a hacer, añadiendo que esta justicia no justifica los delitos ni trata de ser blanda con los infractores sino todo lo contrario, pues posibilita que el delincuente se enfrente cara a cara si es posible, con la persona a la que causó un daño, algo que para muchos infractores es muy duro y difícil.
Quinto, en delitos tan graves, estos encuentros deben tener el objetivo de ayudar a las victimas a superar el delito y facilitar que el delincuente asuma su responsabilidad. Por supuesto, que esta concienciación del infractor puede facilitar la reinserción ya que si verdaderamente se arrepienten, es más probable que cuando salgan de prisión no quieran y no vuelvan a delinquir. Pero esto no debería implicar beneficios penitenciarios, al menos de forma inmediata, ¿Por qué? Porque son delitos muy serios, y si obtuvieran estos beneficios, dañaríamos la sensibilidad de las victimas y de la comunidad, y además nunca podríamos estar seguros de que el arrepentimiento es real y no guiado por cuestiones egoístas e interesadas. Está claro que estos delitos tienen un contenido ideológico y político pero causan unos daños que no se deben minimizar puesto que perjudicaron a seres humanos inocentes.
La conclusión que se puede extraer de estas noticias es que si las victimas, al menos muchas de ellas se oponen a esta forma de ver la justicia, es porque no se está aplicando una verdadera justicia restaurativa o no sé ha sabido transmitir los valores y principios y los beneficios que implica esta. Y por supuesto, respetando las peculiaridades que conlleva ser victima y vivir en el País Vasco, estos delitos han sembrado de victimas toda España y por tanto los beneficios de esta justicia deben ser patrimonio de todos.
Bibliografía
Follow @VirginiaDomingo (Burgos, 17 de mayo 1975)
Soy periodista frustrada, estudié derecho, por defecto y a pesar de todo, me gustó. Fui durante más de ocho años Juez Sustituta, lo que me hizo ver la realidad de la justicia y su falta de humanidad, así llegué en el 2004 a la Justicia Restaurativa. Actualmente soy la coordinadora del Servicio de Mediación Penal de Castilla y León (Burgos) y presidenta del Instituto de Justicia Restaurativa-Amepax ( la entidad que proporciona este servicio). Soy experta y consultora internacional en Justicia Restaurativa. Mediadora Penal y Presidenta de la Sociedad Cientifica de Justicia Restaurativa. Miembro del Comité de investigación del Foro Europeo de Justicia Restaurativa, participo regularmente en las reuniones de este Foro y he ofrecido varias charlas a nivel internacional, asimismo he realizado diversos trabajos de investigación sobre Justicia Restaurativa y mediación en materia penal. Y sigo luchando porque se regule la Justicia Restaurativa como un derecho más para las victimas de cualquier delito con independencia del lugar donde lo sufran.