Resumen
“La denuncia de las imperfecciones del sistema judicial en la Gran Pantalla”
El Cine constituye, sin duda, un buen instrumento metodológico para denunciar las imperfecciones del sistema judicial, porque así como en la realidad la justicia se enjuicia con la inteligencia, en el Cine la justicia conecta con las emociones, lo que permite interiorizar mucho mejor los mensajes que se pretenden trasladar al público.
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I.- Planteamiento del tema
Junto al amor, quizás sea la cuestión de la justicia el otro gran argumento de la historia del Cine que se refleja más habitualmente en la gran pantalla. Podríamos afirmar que casi todo el Cine es “jurídico”, las películas siempre reflejan problemas éticos, morales, sociales etc, bajo el prisma de lo justo o lo injusto.
El Cine, especialmente, el americano ha hecho “de las películas de juicios” casi un género como el Western. Y es que el litigio judicial no deja de ser también una disputa, una lucha entre dos partes enfrentadas, susceptible de reproducir las conductas más habituales del comportamiento humano: el amor, el odio, la venganza, la ambición, la crueldad, la injusticia etc.
Películas sobre juicios hay muchas y muy buenas, quiero destacar diez de ellas, como algunas de las más importantes para el análisis de la problemática que vamos a plantear en este trabajo y recomendar a todos los lectores de este artículo que las vean, porque realmente merecen la pena todas y cada una de ellas: “Doce hombres sin piedad” Sidney Lumet (1957), “Testigo de cargo” Billy Wilder (1957), “Anatomía de un asesinato” Otto Preminger (1959),“Matar a un ruiseñor” Robert Mulligan (1962), “En el nombre del padre” Jim Sheridan (1993), “Justicia para todos” Norman Jewison (1979), “El juicio de Nuremberg” Stanley Kramer (1961), “El Crimen de Cuenca” Pilar Miró (1979), “Veredicto Final” Sidney Lumet (1982 ) y “Algunos hombres buenos” Rob Reiner (1992)
Muchos de estos Filmes constituyen verdaderas críticas profundas a ciertos aspectos de la justicia, tales como: las detenciones arbitrarias, las torturas, las condenas injustas y los regímenes corruptos. En definitiva, son películas que ponen en tela de juicio una justicia, que se puede convertir en injusta con excesiva facilidad al degenerar en instrumento de abusos y atropellos.Y es que, muchas veces, el “sistema de la justicia” lejos de estar por encima de los hombres como debería ser, forma parte de un régimen político concreto, de una estructura de poder determinada, o de unos intereses particulares, que acaban pervirtiéndola por completo. Todo ello puede traer como consecuencia que nuestros sistemas jurídicos de derecho nos protejan hasta que alguien decide que nos dejen de proteger porque le conviene. Por ello, son tantos los ciudadanos que, por sobradas razones, tienen una mala imagen de la justicia.
II.- Líneas argumentales para la crítica al sistema judicial en la Gran pantalla
Si bien es cierto que en un porcentaje muy alto de las películas sobre juicios es normal ver un Filme en el que se juega con el espectador ocultándole datos, mostrando giros argumentales e intentado sorprender al público con una determinada sorpresa final, ejemplos de ello son: “El sargento negro” y “Testigo de cargo”, buena parte de las películas sobre juicios buscan además la denuncia de las imperfecciones del sistema judicial que dan origen a la desconfianza en el mismo, especialmente, cuando se produce un error judicial debido, la mayoría de las veces, al incumplimiento de los deberes éticos y profesionales de quienes administran justicia. Es de destacar, en este sentido, en nuestro propio sistema judicial el caso real del “Crimen de Cuenca”, que fue trasladado magistralmente a la Gran pantalla por Pilar Miró en el año 1979. Estos casos que están basados en hechos reales, que han ocurrido de verdad, nos hace conscientes de la debilidad del sistema en el que vivimos cuando cae en malas manos.
Como líneas argumentales que ponen de manifiesto en el Cine la desacreditación del sistema judicial podemos referir, entre otras: la corruptela institucional, las presiones políticas, la politización de la justicia, el incumplimiento de los deberes éticos y morales de los que administran justicia, los denominados juicios paralelos e incluso el propio modelo judicial.
1.- La corruptela institucional. Que busca culpables prescindiendo de si las confesiones son o no auténticas, incluso si a costa de ello los verdaderos responsables quedan impunes, todo con el objeto de mantener la hipócrita fachada del orden y control, sin detenerse a pensar en la cantidad de vidas que pueden arruinar por el camino. Es un buen ejemplo el que se refleja en la película “En el nombre del padre” basada en hechos reales.
“En el nombre del padre”
Año: 1993. Irlanda
Director Jim Sheridan,
Describe la odisea de un grupo de amigos en las cárceles británicas acusados de unos hechos que no cometieron, que jamás pudieron haber cometido, y cuya detención y posterior condena se produjo sobre la base de un interminable proceso de interrogatorios, presiones, torturas y agresiones.
2.- Las presiones políticas. En algunos casos, no se trata ya sólo de posibles errores judiciales, sino del encarcelamiento premeditado de quien se sabe que no es culpable, o la condena premeditada de inocentes con el fin de vender la detención a la opinión pública. Es un buen ejemplo el caso real que relata la película “Sacco y Vanzetti”.
“Sacco y Vanzetti”
Año1971. Italia
Director: Giuliano Montaldo
La historia de Sacco y Vanzetti tal como es presentada en la película, es todo un ejemplo de la instrumentalización del sistema de justicia en defensa de los intereses políticos de la mayoría conservadora que entendió la condena como un escarmiento. Los dos anarquistas fueron ejecutados por ser tales y como advertencia para otros. La película está concentrada en el juicio, donde queda patente la falta de pruebas y la resolución injusta.
Estas presiones hacen, que más que el conocimiento de la verdad, se busquen unos responsables confesos que poder vender a las jerarquías políticas, a la prensa o a una sociedad atemorizada. Lo que retrata la falsedad de los valores de esa sociedad, pone en evidencia la mentira y mata la credulidad en el sistema, convirtiendo al ciudadano en víctima de la propia justicia. Es el caso que se denuncia en la película “Huracán Carter”, basada también en hechos reales.
“Huracan “Carter”
Año: 1999. EE.UU
Director: Norman Jewison
Basada en hechos reales, narra la historia de Rubin "Huracán" Carter, un hombre de color que se sobrepuso a su problemática juventud y se convirtió en un aspirante al título de los pesos medios de boxeo. Sin embargo, sus sueños se vendrán abajo en junio de 1966, cuando sea injustamente acusado de un triple asesinato ocurrido en un Bar de Nueva Jersey. Condenado en un juicio lleno de errores, Carter fue encerrado en prisión con tres cadenas perpetuas.
3.- La politización de la justicia. Que supone la dependencia del poder judicial del poder ejecutivo y éste del aparato de los Partidos políticos. Esta “politización” daña esencialmente la independencia del poder judicial, cuyas actuaciones deberían regirse por el único criterio de los principios del derecho y de la legislación vigente, sin interferencia alguna de factores de carácter externo en la toma de decisiones. Se denuncia, claramente, en la película “Senderos de Gloria”.
“Senderos de gloria”
Año: 1957.EE.UU,
Director: Stanley Kubrick
Tras una terrible batalla, unos soldados se enfrentan a un angustioso consejo de guerra acusados de cobardía. Los oficiales se llevan toda la gloria de las victorias y, con la excusa de animar a las tropas, organizan consejos de guerra y juicios con sentencias absurdas ya dictadas de antemano.
4.- El incumplimiento de los deberes éticos del personal de justicia. Los errores judiciales son originados, en muchas ocasiones, por un manifiesto incumplimiento de los deberes éticos y profesionales del personal de la justicia: abogados, jueces, fiscales etc, lo que supone que falsos culpables tengan que demostrar su inocencia, o viceversa, podemos citar, como más significativa la película “Anatomía de un Asesinato”.
“Anatomía de un asesinato”
Año: 1959. EE.UU
Dirección: Otto Preminger
El protagonista no se esfuerza por demostrar la inocencia de un acusado, lo que sería lo natural sino algo realmente temible y duro: defender con todas las argucias posibles a un verdadero culpable de cometer un crimen. Sabemos desde el principio que el acusado es culpable.
5.- Los denominados juicios paralelos. Esos que hace la opinión pública en los que ya de antemano la persona está condenada y de los que, desgraciadamente, tantos ejemplos podríamos citar. Un claro ejemplo se denuncia en la película “Matar un Ruiseñor”.
“Matar un ruiseñor”
Año: 1962, EE.UU
Director: Robert Mulligan.
El protagonista encarna a un abogado en un pueblo sureño de Estados Unidos, respetado por todos, que acepta defender a un joven negro que es acusado de haber violado a una mujer blanca. Aunque las pruebas son débiles, la comunidad ya consideró culpable al sospechoso y condena al abogado por tomar su defensa.
6.- El propio modelo judicial. Las películas americanas han desarrollado en el cine su modelo de justicia del juicio por Jurados, donde tan fácilmente se puede condicionar el fallo, lo comprobamos en el Filme “Doce hombres sin piedad”.
“Doce hombres sin piedad”
Año 1957. EE.UU.
Dirección: Sidney Lumet.
Una película sobre la construcción del veredicto, en la que Henry Fonda es el único de los doce que se toma con verdadera actitud cívica y crítica el papel que le ha tocado y se empecina en discutir la certeza de los otros once.
En todas las películas de este corte, respiramos aliviados, cuando se salva una vida inocente, pero nos queda un sabor amargo, por más democrático que sea este sistema de justicia del “jurado”. Y es que en definitiva todo sistema de justicia depende, para ser justo o injusto, de la actitud de los hombres que lo encarnan.
III.- Conclusión
La confianza en la administración de justicia es un valor fundamental en un Estado de derecho, porque el individuo debe tener la seguridad de que el peso de la ley recaerá solamente sobre quien resulte ser el verdadero responsable de la conducta criminal.
Las películas sobre juicios se han convertido en un buen instrumento de denuncia de todos los vicios que existen en el sistema judicial y de recordatorio de que lo que ha ocurrido en el pasado puede volverse a repetir y, de hecho, se repite día a día y en cualquier punto de la geografía mundial.
Javier Nistal Burón
Jurista del Cuerpo Superior de Instituciones Penitenciarias
Bibliografía
Javier Nistal Burón, es licenciado en Derecho y diplomado en Criminología. Pertenece al cuerpo funcionarial de juristas de Instituciones Penitenciarias. Ha publicado más de un centenar de artículos doctrinales en distintas Revistas especializadas; asimismo, es coautor de varias publicaciones y autor de algunos libros sobre la temática penitenciaria.